¿El Home Office llegó para quedarse?

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La pandemia generada por COVID-19 tomó a todos por sorpresa y muchos optaron por continuar el trabajo desde casa. A casi tres meses de confinamiento, ¿las personas se han logrado adaptar a esta nueva modalidad? ¿El Home Office llegó para quedarse?

No sería una sorpresa si después de esta pandemia, más empresas optaran por facilitar y continuar con esta modalidad de trabajo para sus colaboradores, ya que para algunos, los resultados han sido bastante efectivos. Sin embargo, habrá quienes todavía experimenten ciertos inconvenientes , pues es importante que los trabajadores cuenten con las herramientas necesarias que les permitan seguir su trabajo sin problemas o distracciones por estar en casa.

Hazlo productivo

Al momento de establecer un protocolo de trabajo remoto en la empresa es básico y necesario proveer o cerciorarse que los colaboradores cuenten con todo lo necesario para cumplir a cabalidad con sus funciones, esto incluye equipo tecnológico, herramientas, utilería y otros insumos. Asimismo, se debe proporcionar una guía de trabajo que les permita orientar sus actividades y realizar sus tareas laborales de forma eficiente.  A continuación compartimos algunos aspectos que son útiles y esenciales.

  1. Organizar el calendario de entregas: es clave que el jefe de la empresa planifique el trabajo y la gestión de los proyectos con el objetivo de marcar prioridades en función de cada rol y que cada uno sepa perfectamente qué debe hacer a lo largo de la semana.
  2. Planificar y priorizar las tareas como empleado: para implementar el Home Office es importante que cada uno de los colaboradores sepa planificarse y priorice las tareas marcadas con base en los objetivos y las metas de los departamentos.
  3. El horario: los teletrabajadores deben marcar y seguir una rutina de trabajo estructurada. Sin embargo, la flexibilidad de la jornada permite a los empleados adecuar sus horarios y la jornada a su ritmo de vida. De esta forma se favorece la calidad de vida de los empleados y se reduce el estrés laboral. En este aspecto se debe tener especial cuidado a manera que los trabajadores cumplan con la cantidad de horas establecidas por la empresa semanalmente, pero es importante recordar también que el hecho de estar en casa no supone que no deban tener un horario de trabajo establecido que también debe respetarse por parte de los empleadores.
  4. Control y autogestión del tiempo: trabajar desde casa implica autodisciplina y saber manejar correctamente el tiempo de trabajo y el del hogar. Es relevante seguir cierto horario para las tareas laborales y también es esencial aprender a desconectar y terminar la jornada laboral para que esta no se alargue de manera innecesaria y no saturarse.
  5. Realiza un seguimiento de forma periódica: la evaluación de objetivos y metas marcadas es básico para saber si la estrategia de Home Office implementada está obteniendo los resultados positivos esperados o no. Analizando si el desempeño del trabajador es productivo o no. En caso de identificar que la productividad ha descendido es importante rediseñar la estrategia paso a paso y revisar con la persona qué aspectos están incidiendo en el rendimiento.

 

Las empresas no deben olvidar que sus colaboradores son la clave de su marca y en estos momentos difíciles para todos, ellos también necesitan un seguimiento y guía en cuanto a su trabajo. Implementar el teletrabajo es una gran opción en estos tiempos ya que de una manera u otra, deja una enseñanza y disciplina en las personas. Si en un futuro se decide tener de nuevo esta modalidad, se podrá tener más confianza en la eficacia del equipo, por lo que es mejor prepararse desde ahora.

 

Fuente: Sesame / UP Relaciones Públicas

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